Lun. Nov 25th, 2024

Usted necesita saber hoy, a mediados del mes de julio de 2023, que las amenazas de enviar tropas de Estados Unidos a eliminar a los carteles dentro de México son ya más que solo discursos de campañas políticas.

En los últimos tres meses, en las dos cámaras del Congreso de Estados Unidos, se han venido redactando iniciativas de ley para concretar estas acciones.

Usted debe saber también, que, para el partido republicano, todos sus precandidatos presidenciales y la gran mayoría de sus representantes en el congreso, enviar tropas a combatir a los cárteles en México es más que solamente un proyecto legislativo.

Por eso, varias de estas propuestas de congresistas y senadores republicanos ya pasaron por sus primeras audiencias en los comités de las dos cámaras, y en ambas, recibieron la aprobación de los miembros de los dos partidos.

También entre los estadounidenses el concepto ha seguido ganando adeptos y una mayoría sólida de votantes coinciden que es urgente eliminar a los carteles mexicanos. Lo ven como algo necesario para revertir el enorme número de muertes entre estadounidenses de todas las edades causadas por el Fentanilo y otras drogas.

Por otro lado, también a mucha gente le preocupan las consecuencias no anticipadas que tendrían acciones tan drásticas. Temen que eso desate más violencia en México y que importe terrorismo de los carteles a Estados Unidos.

Mientras, entre la comunidad de negocios se argumenta que las acciones militares alterarían muy seriamente, y hasta romperían las relaciones comerciales entre los dos países.

Para que usted sepa cuáles son las propuestas avanzadas en el Congreso aquí están:

  • S-698– Ley designando organización terrorista a los carteles de la droga de los senadores republicanos Roger Marshall de Kansas y Richard Scott de Florida. – Instruye al Secretario de Estado a designar a ciertos cárteles mexicanos como organizaciones terroristas extranjeras y a presentar un informe al Congreso que justifique tales designaciones de conformidad con la sección 219 de la Ley de Inmigración y Nacionalidad.
  • The Narcos Act— Proyecto de Ley del Senado del senador Lindsey Graham, autorizando al ejército de los EE. UU. a realizar ataques aéreos, redadas terrestres y otras operaciones militares dentro de México para eliminar a los cárteles de la droga usando todos los instrumentos que se requieran.
  • H-837— Resolución de la Cámara de Representantes, presentada por el congresista Dan Crenshaw, autorizando al ejército de los EE. UU. a brindar capacitación y asistencia en México y en Estados Unidos a las fuerzas mexicanas para combatir a los cárteles de la droga.
  • Ley de Socios— En el senado, John Cornyn de Texas, presentó esta misma ley del congresista Crenshaw, también enfocándose en el entrenamiento de las fuerzas militares mexicanas para que unidas a las estadounidenses, participen en la eliminación de los cárteles, con operaciones militares estratégicas dentro de México.

    El Senador Cornyn aclaró que él mismo ha tenido encuentros cara a cara con el presidente Mexicano Andrés Manuel López Obrador. La última vez, fue en marzo pasado en la oficina presidencial en Palacio Nacional en la ciudad de México. Durante esa reunión quedó la impresión entre los legisladores estadounidenses que acompañaron al senador Cornyn, que el tipo y cantidad de colaboración que México brinda a Estados Unidos, en contra del tráfico transfronterizo de fentanilo, sigue siendo insuficiente.

    Eso dio vida a:

    •  H-838— Resolución de la Cámara de Representantes, presentada por la representante Elise Stefanik (R-NY), que impone sanciones a los funcionarios mexicanos que sean cómplices del narcotráfico.
    • H-18 SECCIÓN 1— Resolución conjunta de la Cámara Baja citada como la “Autorización para el Uso de la Fuerza Militar para Combatir, Atacar, Resistir, Apuntar, Eliminar y Limitar la Influencia de los carteles”.
    • SEC. 2. CÁRTEL-AUMF— La segunda parte de esta propuesta de ley es una autorización de uso de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos para los fines anteriores.
    • LEY FEND OFF FENTANYL— “DEFENSA CONTRA EL FENTANILO” patrocinada por 61 senadores. Esta declara a los carteles “Organizaciones Criminales Internacionales” y sanciona el lavado de dinero enfocándose en los traficantes de opioides, sancionando a bancos e instituciones de manejo de dinero que permitan que el dinero producto del tráfico de drogas se legalice a través de operaciones financieras y de comercio internacional.

    Esta misma propuesta de ley, castigará a las empresas chinas que producen y exportan fentanilo sin cuidado y los precursores para fabricar fentanilo.

    Todas las propuestas hasta ahora designarán también a los carteles organizaciones criminales, y autorizan a las fuerzas armadas a usar todos sus elementos y recursos para eliminar a los cárteles y sus asociados.

    • La designación terrorista autoriza el uso de «misiles Hellfire» AGM-114, disparados por diferentes aeronaves para eliminar las bases, escondites y sitios de operación de los carteles en territorio mexicano.
    • Autoriza también el uso de drones para lanzar misiles en contra de blancos específicos dentro de México en la misma forma que se les usa para destruir a los terroristas internacionales en otros países.
    • Las fuerzas especiales estadounidenses usarían la información de inteligencia, ya en posesión de Estados Unidos, para conducir ataques quirúrgicos contra los líderes de los cárteles por la noche. Los miembros y líderes de los carteles no podrían volver a dormir una sola noche más, mientras estén con vida.
    • El Pentágono recibiría autorización para usar todos sus activos de inteligencia satelital que se re-enfocarán en la frontera sur y en los estados mexicanos en los que los carteles tienen sus guaridas para ubicarlos.

    Las objeciones

    Los críticos responden que todo lo anterior crearía un clima hostil entre los dos países que seguramente arruinaría la relación con México, uno de sus más importantes aliados estratégicos.

    En México se ha llamado a estas iniciativas, “charlatanería política” de políticos estadounidenses queriendo usar a México para crear un ambiente artificial que les permita ganar sus elecciones locales en noviembre de 2024. Esto no es acertado, muchos senadores apoyando estas resoluciones no tendrán elecciones hasta el 2026 y el 2028.

    Hay mexicanos en las redes sociales criticando a los estadounidenses por no usar a sus policías antinarcóticos, o a sus fuerzas armadas, para combatir el tráfico de drogas incluido el fentanilo que corre libremente por todas las calles, de las casi 20 mil ciudades de Estados Unidos.

    En ambos países, como ocurre todo el tiempo, las cosas son interpretadas de forma muy distinta.

    Una encuesta reciente, de la cadena de Televisión NBC, encontró que el 55% de los estadounidenses votaría más a favor de los candidatos políticos que apoyen el envío de tropas a México.

    En la misma encuesta, el 86% de los votantes republicanos, dijo estar abiertamente a favor del uso de la fuerza militar estadounidense contra los cárteles.

    Consideración importante:

    Las elecciones en Estados Unidos están a año y medio de distancia y las acciones militares sobre las que se ha legislado, contemplan tiempos más cortos de acción. Las encuestas y sus efectos en los políticos de Estados Unidos cambiarían radicalmente en caso de que estas acciones militares salieran, no como en las películas, sino como se esperaría de acciones tan arriesgadas, en la vida real.

    Mientras la exasperación crece, varios republicanos también propusieron imponer sanciones económicas a México, sin darse cuenta de que más de 14 millones de empleos en EE. UU. y billones de dólares estadounidenses en México se perderían.

    Además, las empresas estadounidenses no podrían ya seguir conduciendo negocios con un país que permite a terroristas dentro de sus fronteras.

    ¿Quién les pagaría esas pérdidas?

    Estas acciones militares les costarían mucho a los dos pueblos

    Si México cayera en una crisis causada por la desaparición de su asociación comercial con Estados Unidos, eso resultaría en una depresión económica, que a su vez provocaría un éxodo de proporciones bíblicas a EE. UU. La frontera sur quedaría envuelta en un caos total y eso la tornaría en un peligro de seguridad “Claro y Presente” para los dos países.

    Condena mundial

    Por último, las acciones militares dentro de México crearían una condena mundial similar a la causada por la invasión rusa a Ucrania.

    Además, a diferencia de la invasión a Ucrania, en México los cárteles no visten uniformes; ¿Cómo sabrían los soldados estadounidenses a quién matar o a quién arrestar?

    Hablar es barato y no cuesta nada. Imaginar la vida real como si se tratara de un libreto de cine sería un error histórico. México y Estados Unidos lo que necesitan es diseñar juntos una estrategia real contra el fentanilo y los carteles.

    Porque… invadir a México no es fácil, ni barato.

Por admin

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