México se regocija con su fútbol. La selección olímpica está aceitada y arrolló 3-6 a Corea del Sur para meterse a las semifinales de los Juegos Olímpicos. Su rival será Brasil. Los brasileños ya saben lo que es pasarla muy mal: en Londres 2012 los mexicanos le ganaron la medalla de oro. El Tri quiere sacar del camino a la Canarinha el próximo martes (3.00 hora del centro de México).

La primera impresión del abultado marcador se dirige hacia la idea de que Corea del Sur no fue un gran reto. Grave error. El conjunto asiático fue incómodo para el equipo mexicano en los primeros 45 minutos. La velocidad y persistencia fueron clave.

México quería asumir el protagonismo con hacerse cargo del balón. Corea del Sur, cuando arrancaba, le daba problemas. El conjunto asiático ganaba balones al ataque con faltas que cometían los mexicanos y con los contraataques. El Tri le entregaba todo el mando a sus extremos creativos: Alexis Vega y Uriel Antuna. Esa fue la clave para que los mexicanos se encontraran más cómodos. Vega centró de izquierda a derecha y ahí la volvió a centrar Luis Romo para que la cabeza atinada de Henry Martín hiciera el 0-1. No habían pasado ni 10 minutos cuando los surcoreanos empataron cuando Dong Gyeong Lee sacó un truco del sombrero al chutar de larga distancia y convertir un gol vistoso. 1-1.

Guillermo Ochoa, el líder, arengó a sus compañeros para no desplomarse. Nueve minutos tras encajar el empate Romo anotó de volea gracias, cómo no, a un pase de Vega. Era el momento mexicano. Los tricolor encontraban en los cambios de juego la mejor forma para castigar a Corea del Sur. Antuna desesperó a la zaga defensiva y le cometieron un penalti. Sebastián Córdova, con categoría, chutó para el 1-3.

Jaime Lozano, seleccionador del Tri, prescindió del once inicial de Diego Lainez del Betis. Antuna, con mejor capacidad para desesperar a los rivales, hizo lo suyo. En el segundo tiempo, Corea del Sur sacudió a su equipo con tres cambios para intentar reaccionar. La ferocidad de los coreanos hizo encontrar a Dong Gyeong Lee otra vez con una opción para rematar y fulminó la portería de Ochoa para el 2-3.

México encontró en el balón detenido una oportunidad para pegar. Henry Martín, que tenía problema para encontrar gol en la primera fase, remató de cabeza para ponerlo 2-4. Corea del Sur se aferraba a cualquier error rival. Córdova, con una alta autoestima, pateó de larga distancia para hacer un gran gol: cinco tantos mexicanos. Todavía Antuna falló, sin tanta culpa, frente a la portería. Lozano supo que ya era tiempo para darle minutos a los suplentes. En la recta final los subalternos sentenciaron todo con un gol de Eduardo Aguirre. En los últimos minutos, el coraje surcoreano hizo un gol de alivio con Hwang Ui-Jo. Nada más.

Los mexicanos golearon 4-1 a Francia, perdieron 2-1 contra Japón y vencieron 3-0 a Sudáfrica. El Tri tendrá su partido soñado, de nuevo, contra Brasil. En el otro lado del torneo España se medirá contra Japón.