Brexit, USMCA, COVID, escasez de materiales, solo por mencionar algunos; son recientes adversidades que nos han dejado una gran lección de aprendizaje; la certeza que siempre habrá cambios y amenazas, mismas que estarán presentes año con año, aunque sean impulsados por diferentes cuestiones; ambientales, sociales, políticas o económicas.

Ahora bien, entendiendo que el dinamismo en nuestras industrias seguirá sucediendo, la pregunta que se plantean muchos líderes en las organizaciones es: “¿Tenemos un plan de acción?, ¿Cómo vamos a mitigar dichos riesgos?, y aunque muchos pensarían que éstos riesgos son imprevistos y no hubiera manera de establecer un plan previsor a estos retos, la realidad es que algunas empresas ya han implementado diferentes estrategias en sus organizaciones para prepararse con una mejor posición de defensa para las próximas batallas.

Estructura organizacional

Crear o robustecer las estructuras organizacionales con especialistas en materia SMEs (subject-matter expert) por sus siglas en inglés, con independencia que sea bajo un modelo de contratación directa o indirecta, pero es esencial tener personal que domine las regulaciones, condiciones de los tratados internacionales y en general el marco legislativo del comercio internacional, en adición a habilidades de pensamiento crítico y estratégico para traducir esos conocimientos al incremento de rentabilidad de la empresa.

Aunque la contratación indirecta o “outsource” pudiera ser un reto en México, la realidad es que en otros países se aprovechan las ventajas, especialmente en tema de desarrollo tecnológico, para abastecerse de ese conocimiento y aprovechar la disponibilidad de especialistas ya capacitados, mercados laborales de menor costo y realizar actividades que realmente generen valor a la compañía. Un ejemplo de ello es la determinación de clasificaciones arancelarias que algunas compañías en India realizan a través de programación de algoritmos e inteligencia artificial (Machine learning).

Procesos robustos, pero a la vez flexibles

En adición a lo anterior, generar procesos robustos, pero a la vez que sean flexibles y adaptables, nos permitirán eliminar la subjetividad de realizar funciones similares a través del tiempo. Habrá cambios que, aunque parecieran imprevistos a primera vista, la realidad es que tienen correlación con otros cambios precedentes, en este caso Brexit y USMCA nos enseñaron que las políticas comerciales y económicas pactadas por más de 50 y 26 años respectivamente; a la luz de las necesidades de las partes, son distantes a lo que ofrecen, por lo que se tuvieron que renegociar y modificar de manera disruptiva. Ahora bien, entendiendo este concepto, ¿Cuál será el próximo tratado o acuerdo en renegociarse o celebrarse?, ¿Cuál sería el próximo país en salir o unirse a la Unión Europea (UE)?

Los procesos documentados, además de dar sostenibilidad a la ejecución con el paso del tiempo, también dan a entender a las diferentes áreas dentro de la organización la interdependencia entre los mismos y la responsabilidad que cada uno tiene dentro de este benéfico juego del comercio internacional que contrae muchos beneficios económicos, pero a su vez una carga representativa de obligaciones.

Tecnología para la toma de decisiones

Hoy en día la información no es un recurso que sería bueno contar con él, si no un “commodity” esencial en nuestras organizaciones, la información centralizada en fuentes de datos masivas, que nos permitan correlacionar datos históricos, tendencias y predecir acciones futuras, les permitirá a las empresas destinar de forma eficiente sus recursos más valiosos; el personal, dinero y tiempo.

En esta era digital, debemos permitir a la tecnología realizar todas aquellas funciones que el poder humano no da abasto para realizar, como el análisis en segundos de macrodatos y toma de decisiones en función de ello. Un ejemplo de estas decisiones son las transacciones que ameritan revisión con ciertos países. Ejemplo, derivado de la situación actual con Ucrania y Rusia; las compras y ventas de algunas compañías deberán ser revisadas y aprobadas previo a su ejecución; ¿Cuántas transacciones de compra y venta no generan las compañías billonarias multinacionales?

La función de todo líder dentro de una organización se centra en agregar valor a la compañía, a los individuos con los que interactuamos; a sus supervisores, colaboradores laterales y/o subordinados. En este sentido, generar propuestas de valor y estrategias disruptivas que anteriormente no se hayan experimentado dentro de la organización; retan al intelecto y creatividad humana, pero definen el éxito en las compañías ante este entorno altamente dinámico, competitivo y demandante.

Autora:

Mtra. Erika Betzaira Barrientos, miembro del comité de comercio exterior