El gobierno de Tamaulipas no fue el único que perdió dinero tras la liquidación de Accendo, también lo perdieron Baja California, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Puebla y Estado de México.

El gobierno de Tamaulipas perdió 205 millones 414 mil 533 pesos luego de contratar los servicios de Banco Accendo, compañía que entró en bancarrota en septiembre de 2021.

La titular de la Secretaría de Finanzas de Tamaulipas, María de Lourdes Arteaga, firmó un contrato para adquirir los servicios de Banco Accendo en junio de 2021 para “la contratación de instrumentos derivados”.

De acuerdo con licitación pública 03/2021, el acuerdo entre ambas partes tenía como objetivo “mitigar los riesgos asociados a la tasa de interés en el mercado de dinero” de un financiamiento que adquirió el gobierno tamaulipeco con Banamex en noviembre de 2017.

Es decir, el gobierno de Tamaulipas depositaba realizaba un pago mensual a Banco Accendo, y la compañía se encargaba de pagarle a Banamex dependiendo de cómo se encontraba la tasa de interés volátil.

La convocatoria se realizó el 11 de junio y cuatro días más tarde, el 15 de junio, la Secretaría de Finanzas recibió las propuestas de Banco Accendo y Banorte, pero la dependencia aceptó la oferta de Accendo en fast-track.

Sin embargo, algo que no consideró la Secretaría de Finanzas de Tamaulipas al momento de celebrar el contrato con Banco Accendo, fue que ésta arrastraba problemas en su Índice de Capitalización (ICAP) y pérdidas en los años previos, por lo que su solvencia económica dependía de aportaciones a su capital, de acuerdo con un informe del Instituto para la Protección del Ahorro Bancario (IPAB).

A poco más de tres meses de que se firmara este contrato, el 28 de septiembre de 2021, la Junta de Gobierno Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) le revocó la licencia a Banco Accendo y aprobó su liquidación.

Al caer en proceso de liquidación, Accendo hizo pública la lista de acreedores en la que aparece el gobierno de Tamaulipas, encabezado por Francisco Javier García Cabeza de Vaca.

El gobierno tamaulipeco tenía depositado en dos cuentas la suma de 205 millones 414 mil 533 pesos, dinero del erario que no podrá recuperar por completo, pues la Ley de Instituciones de Crédito Federal establece que la protección de ahorradores en bancos que quiebran es de 400 mil Unidades de Inversión, lo que equivale a cerca de 3 millones de pesos (al precio de agosto de 2022).

El gobierno de Tamaulipas no fue el único que perdió dinero tras la liquidación de Banco Accendo, también lo perdieron los gobiernos de Baja California, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Puebla y Estado de México.

Destaca, en este sentido, el gobierno de Hidalgo que perdió 807 millones 127 mil 783 pesos, seguido por el de Puebla con poco más de 600 millones.