Pese a que el país enfrentará altas tasas de interés y una desaceleración económica, los banqueros dicen que el negocio tiene posibilidades de crecimiento.
Aunque los pronósticos económicos de México para el 2023 son complejos por una alta inflación, elevadas tasas de interés y desaceleración del crecimiento económico, los banqueros aseguran que su negocio tiene potencial de crecimiento.
Los retos para la economía mexicana
Manuel Romo, director general de Citibanamex, considera que uno de los retos es detonar la inversión para que la banca pueda financiar los proyectos que impulsen crecimiento económico.
Las altas tasas de interés es un tema que podría afectar la colocación de crédito en México y algunos bancos han buscado subir poco o mantener tasas en niveles similares a la pandemia.
Sin embargo, las tasas de los créditos hipotecarios -que llegaron a ser de un dígito- ya están regresando a tasas del 10% y la colocación empieza a desacelerarse, de acuerdo con datos de Banxico.
Para Scotiabank, aunque el 2023 será de desaceleración económica, aún tiene oportunidades en la colocación de financiamientos como el automotriz que sufrió en los últimos meses debido a que la falta de chips provocó bajas ventas de autos nuevos.
Las buenas noticias
Los banqueros coinciden en que una de las fortalezas de México se encuentra en la disciplina fiscal que ha mantenido el gobierno federal.
«Creemos que ha sido extremadamente positivo la disciplina fiscal que ha seguido este gobierno, cuando ves los niveles de deuda contra el PIB nos hemos mantenido en niveles sanos y adecuados», asegura Adrián Otero, director general de Scotiabank México.
Otra buena noticia es que pese a las altas tasas de interés, las personas siguen demandando crédito mediante tarjetas, aunque esto se debe a la baja bancarización que hay en el país, refiere Santander México.
Las oportunidades están en el
nearshoring
Una de las mayores oportunidades del país es la relocalización o nearshoring, ya que la llegada de nuevas empresas representa una de las mayores oportunidades para el negocio corporativo de la banca así como los empleos.
«México es un claro ganador potencial de este escenario de desglobalización. Los factores descritos anteriormente están generando una relocalización de amplias cadenas de valor y nuestro país es un candidato inmejorable para recibir inversiones por su cercanía al mercado norteamericano, su amplia y diversificada plataforma exportadora, su extensa red de tratados comerciales, y por su gente trabajadora, y cada día más educada y especializada», acota Manuel Romo.
Adrián Otero añade que una de las pruebas de que la relocalización de las cadenas de suministro ya están en México es con el crecimiento que hay en plantas de almacenamiento en estados como Chihuahua.