La muerte de Ariadna Fernanda López, una joven de 27 años cuyo cuerpo sin vida fue abandonado al costado de una carretera la semana pasada, desató una inusitada confrontación entre las autoridades en México.
El presunto feminicidio llevó a la jefa de gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, a acusar al fiscal general del vecino estado de Morelos, Uriel Carmona, de intentar ocultar el crimen por presuntos «nexos» con el principal sospechoso del caso, algo que este negó categóricamente.
El señalamiento ocurrió después de que la Fiscalía de Morelos anunciara el viernes que la joven había fallecido por una «intoxicación alcohólica y broncoaspiración» y que no había indicios de feminicidio.
Una segunda necropsia encargada por la Fiscalía de Ciudad de México, sin embargo, contradijo esta hipótesis al concluir que el motivo de la muerte fue un «trauma múltiple» causado por diversas lesiones por golpes.
«El fiscal general de Justicia del estado de Morelos está encubriendo y tratando de tapar un feminicidio», afirmó la alcaldesa de la capital este lunes.
Carmona rechazó los señalamientos de Sheinbaum porque «carecen de todo sustento», según expuso a través de un comunicado en el que se mostró «dispuesto a colaborar» en cualquier investigación. También negó conocer al sospechoso y descartó renunciar a su cargo.
Horas antes, la Fiscalía Anticorrupción de Morelos anunció que había abierto una pesquisa «para esclarecer los presuntos actos de corrupción cometidos por personal de la Fiscalía» del estado en este caso.
Por su parte, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, pidió este martes que la Fiscalía General de la República atraiga la investigación «con un enfoque de derechos humanos para que esto se resuelva lo antes posible».
Los gobiernos de Ciudad de México y Morelos son parte del proyecto político del presidente López Obrador, por lo que la acusación ha generado sorpresa.
Sin embargo, el fiscal general de Morelos es designado de manera independiente por el Congreso estatal y no por el Ejecutivo de ese estado.
¿Qué se sabe sobre la muerte de la joven?
Ariadna Fernanda López fue vista el pasado domingo 30 de octubre en un restaurante en el centro de Ciudad de México.
Según las investigaciones, ella y otras dos personas -identificadas como Rautel N y Vanessa N– se dirigieron a un departamento cercano donde vive Rautel N.
Fue ahí donde se perdió la pista de la joven.
El lunes, un par de ciclistas que realizaban un recorrido en una carretera entre Ciudad de México y Morelos alertaron a las autoridades del hallazgo de un cuerpo sin vida que más tarde se confirmó que era el de López.
Por el lugar donde fue hallada, la investigación inicial correspondió a la Fiscalía de Morelos. Días después, Carmona presentó un informe a la prensa en el que aseguraba que la joven no tenía signos de violencia en su cuerpo.
«Hasta este momento lo que nosotros tenemos corroborado jurídicamente y científicamente es que la causa de muerte de Ariadna N es por una grave intoxicación alcohólica y una consecuente broncoaspiración», declaró el viernes.
«No encontramos en ella huellas de violencia… Técnicamente, forensemente, hasta este punto la necropsia no es coincidente con un feminicidio», añadió.
El cadáver fue entregado a sus familiares, quienes notaron que López presentaba marcas en el cuello y cuerpo que podrían ser indicios de que había sufrido golpes.
Una segunda autopsia
El domingo, la fiscal de Ciudad de México, Ernestina Godoy, informó que su equipo determinó luego de un segundo análisis forense realizado a petición de los familiares de la joven que murió por un «trauma múltiple mortal».
«Son lesiones por golpes que llevaron a que ella perdiera la vida», afirmó Godoy, lo cual contradecía el análisis forense realizado por su contraparte en Morelos.
Vanessa N fue detenida por su presunta implicación en el caso y Rautel N se entregó horas después defendiendo su inocencia.
En un video de cámaras de seguridad, Ariadna Fernanda López es identificada como una de las personas presentes en el restaurante el domingo. En otro, aparece en el edificio de departamentos donde vive Rautel N.
En imágenes se ve al sospechoso cargando a la joven inmóvil que, según dijo Sheinbaum al presentar los videos, es llevada «ya sin vida».
Este martes, un juez dictó prisión preventiva contra Rautel N por su supuesta participación en el delito de feminicidio en agravio de la joven.
«Encubrimiento»
Una presunta vinculación de Rautel N y el fiscal general de Morelos es lo que Sheinbaum denunció como parte de un intento de encubrimiento del posible feminicidio de la joven.
«Es evidente que la fiscalía general de Justicia del Estado de Morelos quiso ocultar el feminicidio de Ariadna, presuntamente por sus nexos con el probable feminicida», afirmó.
Al ser cuestionada sobre qué pruebas hay contra el fiscal de Morelos, Sheinbaum dijo que «eso tiene que determinarlo» la Fiscalía de Ciudad de México, pero que sabía que «hay una presunta relación».
Este martes, la jefa de gobierno ofreció más detalles al declarar que «el presunto feminicida tiene negocios en el estado de Morelos, él y su familia. No es que el estado de Morelos sea algo extraño a ellos».
«Hay evidencias de que este fiscal no quería llegar ni a la verdad, ni a la justicia», insistió después de calificar la investigación de «desaseada» y «encubridora».
«Si no hubiera entrado la Fiscalía General de Justicia en la Ciudad de México, este feminicidio hubiera quedado impune», reafirmó.
Pero, entrevistado por Milenio TV, el fiscal Carmona negó este martes los señalamientos de Sheinbaum.
«No hay ningún encubrimiento ni ninguna razón para hacer algo así (…). Yo no conozco a esta persona (el principal sospechoso) ni nadie de la gente que tuvo que ver con estos hechos, me es completamente ajeno», aseguró.
Horas antes, el fiscal subrayó que la investigación seguía abierta. «Nunca dijimos que no había feminicidio, dijimos que no se tenían las pruebas para acreditarlo, pero iban a seguir las investigaciones hasta dar con la verdad absoluta», dijo el lunes al diario El Sol de Cuernavaca.
«Vamos a colaborar, no a pelear ni polemizar con nuestros compañeros de la Ciudad de México», añadió a la vez que descartó la posibilidad de «renunciar ni dar de baja a nadie» por las diferencias en las necropsias.
En un comunicado de su Fiscalía el lunes, Carmona negó «categóricamente los señalamientos realizados por cualquier servidor público hacia su persona y a la institución que encabeza». Se mostró «dispuesto a colaborar en cualquier investigación tanto en lo personal como al interior de la propia Fiscalía» de Morelos y defendió la labor de su equipo.
«El dictamen de necropsia se realizó por médicos forenses certificados pertenecientes a una fiscalía autónoma, ajenos a la alteración de pruebas o fabricación de delitos y que fueron los primeros que tuvieron contacto con el cadáver de la víctima (…). El personal forense de la Institución se encuentra certificado, plenamente acreditado y cuenta con la experiencia y probidad necesaria que lo hacen un equipo confiable», se lee.
Sin embargo, con el objetivo de esclarecer lo sucedido a la mayor brevedad, anunció que «se remitirán todas las actuaciones para que sirvan a esos propósitos a la Fiscalía de la Ciudad de México en cuya autonomía la sociedad debe confiar».
Este martes, sin embargo, Sheinbaum hizo público que esto aún no había ocurrido. «¿Por qué se tardan en entregar la carpeta (de investigación)? ¿Qué le quieren arreglar a la carpeta?», respondió cuando se le preguntó si consideraba que el fiscal quería obstaculizar el caso.