La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) investiga un brote de hepatitis ‘A’ relacionado con fresas orgánicas congeladas provenientes de Baja California, México.

En un comunicado dado a conocer, señaló que se identificaron nueve casos entre febrero y abril de este año, de los cuáles tres requirieron hospitalización.

Las fresas se vendían en bolsas, algunas mezcladas con otras frutas, en tiendas como Walmart, Costco y HEB, en Oregón, Colorado, Texas, California y Arizona

La FDA informó que identificó empresas adicionales que pudieron haber recibido productos potencialmente contaminados, por lo que inició los trabajos con estas compañías para garantizar que estos productos se retiren del mercado.

El pasado lunes, la empresa Willamette Valley Fruit Co. de Salem, Oregón, inició el retiro voluntario de paquetes selectos de productos de frutas congeladas que contienen fresas cultivadas en México, debido a la posibilidad de contaminación por hepatitis A.

Además de esta empresa, Wawona Frozen Foods, California Splendor y Scenic Fruit son otras de las compañías involucradas en la investigación federal.

De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), el 100% de las personas que proporcionaron información sobre lo que comieron antes de enfermarse reportaron haber comido fresas orgánicas congeladas.

La investigación de rastreo de la FDA identificó un proveedor común de las fresas orgánicas congeladas. Las fresas utilizadas por este proveedor fueron importadas de ciertas fincas ubicadas en Baja California, México, en 2022.

Además, la cepa del virus de la hepatitis A que causa enfermedades este año es genéticamente idéntica a la cepa que causó el brote de infecciones por el virus de la hepatitis A en 2022, que se relacionó con fresas orgánicas frescas importadas de Baja California, México, y vendidas en varios minoristas.

La hepatitis A es una enfermedad del hígado contagiosa, que resulta de la exposición al virus del mismo nombre.

Puede cursar como enfermedad leve que dura unas pocas semanas hasta una enfermedad grave que dura varios meses. La enfermedad generalmente ocurre dentro de los 15 a 50 días de la exposición e incluye fatiga, dolor abdominal, ictericia, pruebas hepáticas anormales, orina oscura y heces pálidas.

En casos raros, particularmente en personas que tienen una enfermedad grave preexistente o están inmunocomprometidos, la infección por hepatitis A puede progresar a insuficiencia hepática.

Por lo tanto, la FDA recomienda a las personas que pudieron haber consumido el producto que consulten con su médico de inmediato.