Cerca de 150 miembros del Grupo de Puebla, que agrupa a políticos progresistas de España y Latinoamérica, se darán cita de forma presencial en la Ciudad de México entre el 29 de noviembre y el 1 de diciembre, informó este miércoles la organización en un comunicado.
«Se reunirán en la Ciudad de México en su séptimo encuentro, y el primero presencial tras el receso por la pandemia por covid-19, para debatir sobre las necesidades urgentes que enfrentan América Latina, el Caribe, Europa y el mundo», detalló el Grupo de Puebla.
Este foro, que fue creado en 2019 en la ciudad mexicana de Puebla, está integrado por destacados políticos de izquierda como los presidentes de Argentina, Alberto Fernández, y de Bolivia, Luis Arce; o los expresidentes de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva, de Uruguay José Mujica y del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero.
En el encuentro, que se celebrará en México con motivo de los dos años de su fundación, se espera que asistan más de 150 líderes progresistas entre presidentes, expresidentes, excancilleres, parlamentarios, juristas, académicos y observadores.
El Grupo de Puebla destacó que la cumbre se celebrará «en días expectantes por la elección de Honduras y la segunda vuelta presidencial de Chile».
Además, reveló que se dialogará sobre «una agenda progresista que considere la necesidad de un modelo solidario de desarrollo», así como la «consolidación» de las democracias en la región y «la autodeterminación de los pueblos».
En estos dos años, el foro se ha pronunciado sobre diversos eventos como la detención de Lula da Silva por supuestos delitos de corrupción, exigiendo su puesta en libertad; la renuncia a la presidencia de Evo Morales en Bolivia en 2019, que calificaron de golpe de Estado, y la «persecución judicial» el año pasado del exmandatario Rafael Correa, en Ecuador.
Además, también han criticado los protocolos policiales en las protestas sociales de Colombia o Chile y han juzgado el bloqueo económico unilateral de Estados Unidos contra Cuba.
En paralelo, el grupo celebró nuevos «soplos de viento progresista» en la región como la elección de los nuevos Gobiernos izquierdistas de Argentina, Bolivia y Perú o la Asamblea Constituyente chilena, la primera paritaria del mundo y de tendencia progresista.