“Va a ser un 2022 duro, y posiblemente un 2023 aún más duro”, alertó la gerente Kristalina Georgieva
“Va a ser un 2022 duro, y posiblemente un 2023 aún más duro con un mayor riesgo de recesión”, alertó.
De ahí que anticipó que el FMI revisará a la baja sus estimaciones contenidas en las expectativas económicas mundiales que darán a conocer a finales de julio.
Como resultado, los indicadores recientes apuntan a un segundo trimestre débil, «y proyectamos una nueva rebaja del crecimiento mundial tanto para 2022 como para 2023 en nuestra Actualización de las Perspectivas de la economía mundial a finales de este mes”, dijo.En unos comentarios previos a la reunión de ministros de finanzas y gobernadores de bancos centrales del G20 que se llevará a cabo en Bali, Indonesia este 15 y 16 de julio, afirmó que la inflación es más alta de lo esperado e incluso se amplió más allá de los precios de los alimentos y energéticos.
Georgieva estableció que frente a ese panorama, los principales bancos centrales han tenido que responder con una mayor contracción monetaria, lo cual es necesario, pero pesará sobre la recuperación, reconoció.
Hizo ver que las continuas interrupciones relacionadas con la pandemia, especialmente en China, y los nuevos cuellos de botella en las cadenas de suministro mundiales han frenado la actividad económica.
Ante ello, hizo un llamado al G20 para liderar una acción decisiva y una fuerte cooperación internacional.